Los perros lo hacen, los roedores lo hacen, hasta algunos insectos lo hacen. Todo tipo de animales aplican saliva en sus heridas mientras las personas no dejamos de repetirlo a modo de mantra. Tal vez de pequeño hayas probado a intentarlo, pero el gusto de la sangre no parece atraernos. ¿Se trata de eso, de un gusto no desarrollado? ¿Por qué otros animales sí son capaces de llevar a la práctica el dicho?
Lamernos no, pero poner saliva sobre una herida tampoco es tan extraño. La respuesta de este gesto radica en las propiedades curativas de la saliva, así como en las acciones auto-calmantes de lamerse. Lamerse las heridas es una respuesta instintiva, perfeccionada por la selección natural, que puede aliviar la irritación y el dolor e incluso ayudar a que las lesiones se recuperen más rápido.
Es algo innato hoy que comenzó con sus antepasados los lobos. A falta de pulgares y medicamentos, la acción de lamer era su mejor opción y, al menos, sigue siendo una opción hoy en día. Es una inercia tan aprehendida como la de frotarse el pie después de golpearse, en el caso de las personas. Tan sencillo como que todos sentimos el dolor y, por tanto, la necesidad de paliarlo.
La saliva de un perro es efectiva, por ejemplo, para matar Streptococcus canis, una forma de estreptococo que infecta principalmente a los animales, pero también al E. coli, otra bacteria bastante común, según un estudio de 1990 publicado en la revista 'Physiology & Behavior'. Pero eso no es todo: la saliva, además, contiene compuestos que promueven el crecimiento de la piel y el cierre de heridas, según un estudio de 1979 en la revista 'Nature', también la de los roedores.
Sin embargo, la idea puede ser tan buena como mala. De un gesto beneficioso puede tornarse poco seguro: pasar la lengua por la piel abierta podría aumentar el riesgo de infección. ¿El problema? Las bacterias bucales.
¿Más daño o beneficio?Hoy en día, que tu perro, tu gato o cualquier animal se lama una herida puede causar más daño que beneficio. De hecho, lamer una herida quirúrgica puede dañar o sacar las suturas, y esto "hace que una lesión muy pequeña se convierta en un gran desastre". Esta es la explicación de los collares cilíndricos.
Las cosas que evolucionan no son 100% correctas, tienen que ser útiles el 75% del tiempo o el 50% del tiempo, y aun así serán mantenidos por la selección natural porque es mejor que nada. Así, sí sigue siendo la mejor alternativa para los animales salvajes.